PEÑAROL

La historia del partido dice que nueve jugaron como once o, mejor dicho, se las ingeniaron para que los dos de menos por las tarjetas rojas recibidas en la primera mitad no se acusaran en la medida que pudo hacerse.

Lo real, entonces, es que Peñarol aguantó, se hizo grande en la adversidad, luchó como se lo demanda la historia y evitó que el adversario lo tirara a la lona en el partido.

El sacrificio en la marca, la manera en la que se cubrieron los espacios y hasta el despliegue que realizó Juan Manuel Olivera para hacer que los darseneros "sufrieran un poquito en el fondo", fue supervaliosa. Digna del aplauso que le tributó la gente.

Y esa es la parte buena, sobre todo porque Peñarol empezó perdiendo el cotejo de manera muy temprana y porque al ratito no más lo mandaron a las duchas a Damián Macaluso por la infracción contra Leandro Rodríguez.


Pero hay una parte mala. Es decir, hay unas páginas de la historia que no permiten sacar la mejor lectura. Es que la hora del campeonato, por más que esto recién comienza, el equipo de Jorge Da Silva ya perdió cinco puntos sobre seis disputados. Lo que, sinceramente, es una barbaridad para cualquier aspirante a levantar el trofeo.

Para que eso suceda, también hay otros elementos que son determinantes y muchos de ellos no tienen nada que ver con las rojas que sacó Prudente (la primera inobjetable, la segunda quizás más polémica). Porque ya no se puede admitir bajo ningún concepto que a los carboneros les sigan metiendo goles en las jugadas de pelota quieta.

Y con un agravante, Macaluso estaba cometiendo penal e igual le cabeceó el Christian González para el 1-0.

Además, la defensa mirasol volvió a demostrar una flojedad irritante, lo que al final no fue explotado por los jugadores de River porque Peñarol recurrió a su coraje para tirar la camiseta para adelante.

Lo que puede sostener la ilusión de que el equipo podrá ir mejorando es que la tarde que debió ser de la frustración total terminó inspirando a la gente porque hubo alma. Esa que se precisa para lo que viene.

La cifra

5

puntos ya dejó por el camino el equipo de Peñarol en las primeras dos fechas del Torneo Apertura.

LA ESTRELLA

J. M. Olivera

Convirtió el gol del empate y se las arregló para complicar siempre. Antonio Pacheco sufrió fractura de tibia y peroné. Y peor aún, fue con desplazamiento, es decir, los huesos involucrados en la lesión se desalinearon. Eso implicó una intervención quirúrgica que la sanidad aurinegra dirigida por el doctor Alfredo Rienzi programaba al cierre de esta edición, en el Hospital Británico, para las primeras horas de hoy.

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Aún en Casa de Galicia, adonde fue derivado en principio el "Tony", casi dos horas después de la fractura, Rienzi contó que el capitán aurinegro estaba "dolorido, por supuesto, pero ya aceptó la gravedad de su lesión". En estos casos, no se puede determinar de antemano el tiempo de inactividad que tendrá Pacheco, "pero serán varios meses, seguro", según Rienzi. Lo mínimo, cuatro meses.


El momento vivido en el Centenario fue tremendo. Tristemente inolvidable. "Por el ruido horrible que se escuchó desde la platea, ya se vio que era algo grave. Pero estamos seguros que va a volver a ponerse la camiseta de Peñarol para despedirse de la manera que se merece", afirmó el vicepresidente de los aurinegros, Edgar Welker.


En tanto, el presidente, Juan Pedro Damiani, fue directamente del Centenario a Casa de Galicia. Allí estuvo largo rato con Pacheco y su familia. "Sabemos la fortaleza que tiene el `Tony`, pronto lo vamos a disfrutar otra vez en la cancha, como lo estábamos haciendo hasta el momento de la lesión", aseguró Damiani.


Ya en el Británico, el capitán de Peñarol recibió varias visitas. Los compañeros, claro, fueron cayendo con el correr de las horas. Pero hubo excompañeros desde el primer momento y hasta actuales "rivales", como Adrián Romero, compañero en las formativas.


Y los hinchas de Peñarol no podían faltar. Los hubo en buen número, tanto afuera de Casa de Galicia, mismo mientras seguía en juego el partido, hasta luego, soportando el frío en las afueras del Británico.


Lo llamativo del caso, aunque de Pacheco sorprenda menos, es que hasta en el momento de ser trasladado desde la ambulancia hasta la habitación 418 de ese sanatorio, "Tony" hizo gala de su condición de ídolo y se tomó el tiempo de saludar, aunque sea desde lejos, a los hinchas alojados afuera.


Las redes sociales fueron inundadas de mensajes de aliento para Pacheco. Y varios jugadores uruguayos del medio local y del exterior utilizaron Twitter y Facebook para demostrar su tristeza y, sobre todo, su apoyo: Alcoba, Chevantón, Cavani, fueron de los primeros, pero más y más se fueron sumando con el paso de las horas.


El mismo día en que Pacheco comenzó un torneo muy especial para él, el mismo se le terminó ante la azorada mirada de una hinchada que lo extrañó un año y ahora tendrá que volver a esperarlo. 

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Emiliano Albin ya esta en Buenos Aires para sumarse a los entrenamientos de Boca Juniors.

Tras varios dias de negociaciones el jugador logró su cometido y es jugador xeneize.
La novela que tuvo como protagonistas a Emiliano Albín, Peñarol y Boca Júniors de Argentina llegó a su fin y el jugador ya está en Buenos Aires para sumarse a los xeneizes.
El futbolista que tuvo su reciente actuación con la selección uruguaya de fútbol en los Juegos Olímpicos de Londres, viajó ayer al mediodía rumbo a la capital de Argentina para enrolarse al equipo que dirige Julio César Falcioni, quien solicitó a los dirigentes de Boca la contratación del polifuncional.
Albín se fue a Boca cedido a préstamo por un año, por 200 mil dólares y con una opción a compra que asciende al millón de dólares.
Con la baja de Albín, Peñarol solo saldrá al mercado a buscar un lateral en caso de que Alejandro González emigre al exterior, de lo contrario, Da Silva mantendrá el plantel.
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Nicolas ramirez  entrena ya en Los Aromos  a la orden de Jorge Da Silva.



El jugador argentino Nicolás "Toro" Ramírez de 24 años, procedente del Atlanta, club en el que quedó en calidad de "libre", llegó hoy a nuestro país y ya entrenó por primera vez en su nuevo equipo.
Ramírez es una apuesta a futuro del presidente de la institución "Carbonera", tal como ocurrió con Alejandro Martinuccio.
Ficha Técnica
Nombre: Nicolás Francisco Ramírez.
Fecha nacimiento.: 18 de febrero de 1988.
Lugar: Buenos Aires, Argentina.
Altura: 1,73 metros.
Peso: 71 kilos.
Puesto: Puntero.
Trayectoria: Lanús (Argentina) 2006-2009, Chacarita Júniors (Argentina) 2009-2010, Lanús 2010, Manta (Ecuador) 2011, Atlanta (Argentina) 2011-2012.
Goles: 8.